Las nuevas tecnologías han supuesto una revolución en muchos ámbitos y sectores, y la transformación digital de las comunicaciones empresariales es ya una realidad. Ha cambiado nuestra forma de comunicarnos, de comprar, de relacionarnos e incluso de trabajar; por lo que las empresas no pueden quedarse fuera de esta digitalización.
Esta transformación digital no solo supone una nueva forma de abrir mercados o aprovechar oportunidades de negocio, sino que nos hará mejorar en rentabilidad y competitividad.
El término de transformación digital o digitalización puede resultar confuso, y son muchas las compañías que no dan el paso definitivo por desconocimiento, informaciones erróneas o miedo a los cambios. Pero están perdiendo una oportunidad única de asimilar una tecnología que potencia las relaciones con los clientes y su satisfacción, y por lo tanto los beneficios del negocio.
Debemos considerar los siguientes puntos:
Precisamente, la comunicación y la conexión con clientes es uno de los aspectos donde mejor se puede implementar la transformación digital de una empresa. Con un software como Cloudya, tendrás acceso a diferentes funciones que cambian por completo la relación con otras partes relacionadas con tu negocio.
El departamento de atención al cliente es uno de los factores más importantes de todo el proceso que se vive dentro de una empresa. Con este tipo de herramientas, estamos consiguiendo una evolución del call center que va más allá de la gestión de llamadas. Identificar las necesidades de los clientes y ayudarles es el paso previo para su fidelización.
¿Sabías qué…?
De esta manera, podemos conseguir una mejor customer experience a través de diferentes modelos de trabajo, pero siempre haciendo uso de estas nuevas tecnologías. Por ejemplo, un CRM que englobe los datos e información relevante y se integre con las plataformas de comunicación es fundamental para un buen servicio.
Actualmente, la digitalización está presente en las empresas de manera muy incipiente, tanto a nivel tecnológico como en la transformación de procesos. Vamos a analizar ahora algunos aspectos clave que nos permitirán acercarnos, poco a poco, a este horizonte teórico en el que la digitalización sea completa.
Una de las primeras decisiones que debe tomar una empresa en materia de transformación digital es realmente creer en la innovación. Tomar las riendas de un camino que ya se está recorriendo, es el primer paso para subirse a la digitalización del mundo corporativo.
Es cierto, no es fácil adoptar algunos cambios gubernamentales, de estructura o de procesos, ni adaptarse rápidamente a ellos. Por eso hay que levantar la mirada y fijar nuestra vista a largo plazo, derribando las posibles barreras mentales que surjan y probar nuevas formas de comunicarnos. Esa es la única manera de avanzar.
Por ejemplo, empezar por cambiar el sistema telefónico de tu empresa. O por integrar una aplicación que mida con diferentes criterios la satisfacción del cliente. Interactuar con estas nuevas tecnologías, cuestionar lo que se sabe de antes y tratar de cambiar la forma de pensar. Así cambiará también la forma de hacer las cosas.
Siempre hay que pensar en el resto de personas que se encuentran dentro de la organización, y el cambio de un individuo dentro de un grupo de miles no tiene verdadero impacto. Es necesario empezar por un pequeño grupo e ir sembrando la semilla de la digitalización.
Por ejemplo, el responsable de un equipo que todavía hace las cosas por medios analógicos, tiene dos opciones:
O ser capaz de adaptar a la gente que conoce a un entorno nuevo, o formar un nuevo grupo que se adapte a las necesidades actuales del mercado y la sociedad.
Analizar y comparar el rendimiento tanto dentro de la propia empresa como de las del sector o, incluso, con aquellas que están muy lejos, es una excelente forma de alcanzar la excelencia. Y con la transformación digital esto es todavía más importante y, por suerte, más sencillo.
No debe perderse la pista a las empresas que lideran el mercado a nivel tecnológico y digital, y suscribirse a newsletters u otro tipo de comunicaciones de quienes lleven la voz cantante. Fijarse en ellos es vital para saber qué se está haciendo, qué funciona y qué se ha quedado atrás.
No hace falta que sea una gran empresa. Solo es necesario observar la manera en la que adaptan su forma de trabajar a las tecnologías, cómo aplican la digitalización a sus procesos.
Las metodologías ágiles, en un principio ideadas para el diseño y desarrollo de softwares, poco a poco se han ido utilizando en otros campos de trabajo. Este tipo de procesos son los que ayudarán a simplificar toda la cadena de trabajo, ofreciendo al cliente final un valor igual o mejor que antes, pero maximizando la eficiencia de los recursos.
Adoptar este sistema de trabajo de mejora continua, con feedback actualizado en tiempo real y que permite que los cambios se introduzcan en cualquier momento, será el último de los pasos clave de la digitalización.
Teniendo en cuenta lo que hemos ido analizando a lo largo del post, vamos a ver algunas ideas que te pueden ayudar a dar el paso para que tu negocio sea más digital. Recuerda que este proceso es integral, debe evolucionar toda la cultura de la empresa, pero podemos empezar con acciones concretas:
Recuerda que tienes acceso a las subvenciones del Kit Digital con el que podrás hacer frente a muchas de estas acciones para dar un importante salto cualitativo en tu empresa.
No son pocas las empresas que ya han iniciado su transformación digital de su plataforma de comunicación y en otros ámbitos, aunque vayamos dando pequeños pasos. Es el mejor momento para decidirse y unirse a una revolución que está más cerca que nunca.