El proceso de transformación digital en las empresas comenzó hace ya tiempo. Desde hace unos meses, la propagación del Covid-19 ha creado un particular escenario (confinamientos, distancia social, tiendas físicas cerradas...). Y todo ello ha apresurado el proceso de transformación digital para muchos negocios, que luchan por salir adelante.
La salud de la economía mundial se encuentra en entredicho, y las empresas deben adaptar su funcionamiento y dar a sus clientes lo que necesitan. La transformación digital es clave para conseguirlo.
Evolución del proceso de transformación digital en las empresas debido al Covid
Antes del Covid-19 el proceso de transformación digital en las empresas se encontraba en distintas fases:
- Algunas se resistían a iniciar el proceso de transformación digital, bien porque no contaban con los medios necesarios (tecnología, personal, inversión…), o simplemente porque se encontraban cómodas con su propia fórmula.
Es cierto que, ya antes de la emergencia sanitaria, la proliferación de negocios online y la oferta en Internet estaban en pleno apogeo. Pero esto ocurría sobre todo en el sector de las compras (de variados tipos de productos). Mientras que, en otros ámbitos, había negocios que no necesitaban digitalizarse porque presentaban su oferta y prestaban sus servicios de forma presencial.
- Otras, en cambio, ya se habían decantado por digitalizar sus funciones, procesos y servicios por distintos motivos. En muchas ocasiones, se trataba de empresas que nacieron directamente en Internet. También se daban casos de utilización puntual del teletrabajo (durante viajes de los empleados, por ejemplo), la gestión a distancia, etc.
Sin duda, el pasado mes de marzo ha marcado y marcará un antes y un después en nuestras líneas de vida. La irrupción en escena del Covid-19 es un punto de inflexión en muchos aspectos. Las cosas han cambiado, eso está claro. Pero este cambio es mucho más profundo de lo que puede parecer a simple vista.
El futuro pinta totalmente distinto. Estudios recientes sitúan por encima del 90% el número de las empresas que tienen previsto desarrollar cambios en su TI.
Hemos pasado una larga temporada aislados. Y no solo eso, sino que el virus clausuró durante mucho tiempo los que eran, y son, lugares principales de nuestra vida en sociedad. Se han cerrado comercios, escuelas, hostelería, servicios públicos, y muchísimos centros de trabajo.
Así las cosas, con la vida a medias detenida, hubo que continuar de otra manera. Por supuesto, de una manera no presencial. Sin la entrada en juego de la digitalización, esa continuación no hubiera sido posible.
En los colegios, las clases online, con profesores y alumnos conectados en videollamadas grupales (utilizando en muchas ocasiones fórmulas basadas en MS Teams), posibilitaron concluir el curso de la mejor manera posible.
En las oficinas y otros centros de trabajo (tanto públicos como privados), la gestión pudo seguir adelante gracias a soluciones relacionadas con la transformación digital de las empresas. Se promovió la implantación de soluciones centradas en el teletrabajo (creación de espacios de trabajo digitales), la gestión empresarial en la nube, y la flexibilización de las comunicaciones.
También cobró gran importancia la atención al consumidor, en un momento en el que todos necesitábamos sentirnos cuidados y protegidos. La clave fue aprender a interactuar con los clientes en su mismo idioma. En este caso, online.
Predicciones sobre el uso de lo digital
En este punto es muy interesante aludir al estudio sobre la inversión IT en España (realizado por IDC). Los datos recabados demuestran que el 47% de las empresas participantes en sus encuestas piensan continuar con sus políticas de Smart Working tras la finalización de la pandemia.
Esas cifras corresponden a una información obtenida en las primeras fases de los confinamientos, concretamente en España. Pero las circunstancias actuales confirman la tendencia. Sin lugar a duda, parece que una vuelta a la situación anterior es impensable. Nos hallamos, realmente, cara a cara con una nueva normalidad.
Dentro de esta nueva normalidad, la implantación de sistemas de comunicación ubicados en la nube ha creado los lugares adecuados para trabajar en equipo. Este tipo de sistemas, ha permitido continuar trabajando y poner en común ideas, resolver problemas, y llevar a cabo una comunicación eficiente dentro de la empresa. Además, también han proporcionado el marco necesario para acompañar a los clientes y fomentar el teletrabajo y el smart working.
Junto a estas innovaciones aparecen cuestiones importantes, como la seguridad. Es básico optimizar el cuidado de la información (de los clientes y de la empresa). Establecer contraseñas, encriptado de datos o elegir un software adecuado son puntos vitales.
Muchas empresas, aprendiendo a marchas forzadas, han visto cómo Internet y las nuevas tecnologías se han convertido en su tabla de salvación. Soluciones como Cloudya flexibilizan la comunicación y facilitan el cambio de estructuras de las empresas. Y, además, existen muchas ventajas añadidas: reducción de costes, fomento de la sostenibilidad, conciliación familiar, etc.
Desde NFON te acompañamos en el proceso de transformación digital de tu empresa, ¡únete!