¿Quieres saber qué es un cuadro de mando integral? Un CMI es un dispositivo que sirve para que una empresa pueda medir sus índices en tiempo real. En el marco del trabajo en remoto ha significado un antes y un después, y todavía más sabiendo que la pandemia de la Covid-19 sentó un precedente respecto al trabajo no presencial. De hecho, las búsquedas en Google de 'trabajo desde casa' crecieron un 309 % en 2020 respecto a 2019, según el portal Remoters.
¿Qué es un cuadro de mando integral?
Se trata de una herramienta que ayuda a conocer en tiempo real la situación y evolución de una empresa. Esta información se genera gracias a unos indicadores, gráficos y numéricos, que ofrecen una perspectiva general del negocio. Este conocimiento es crucial para ayudar a tomar decisiones que marquen el rumbo de la empresa y corregir algunos procesos sobre la marcha sin necesidad de tener que rectificar una acción cuando ya es demasiado tarde.
Al principio, estas herramientas solo daban una radiografía de la perspectiva financiera de una empresa y se solían presentar cada trimestre. Pronto se observó un déficit claro, dado que analizar el estado de una empresa con datos que hacían referencia a los meses anteriores no servía para conocer en qué punto se encontraba la empresa en el momento y poder tomar acciones de gestión empresarial realmente efectivas.
Estructura y métricas
La estructura y las métricas que se tienen que valorar en un cuadro de mando responden a la estructura concreta de la empresa. En líneas generales, un cuadro de mando evalúa el estado financiero de la empresa, la relación con el cliente y los procesos internos de la empresa, así como la formación y el desarrollo.
Respecto a las métricas en relación con el CMI, en general, suelen oscilar entre 15 y 20. Estos KPIs deben de elegirse con sumo cuidado para que, realmente, ofrezcan información de aquello que es decisivo para la gestión estratégica empresarial.
Pros y contras del CMI
Las ventajas de un CMI son obvias, ya que tener el control de la empresa en tiempo real permite no solo tener capacidad de acción sino también de reacción. Sin embargo, si no se eligen correctamente los KPIs se puede producir una distorsión de la realidad y fracasar en la estrategia de negocio.
Estos son los pros de contar con un cuadro integral de mando en tu empresa:
- Visión global. Te ayuda a controlar el escenario de la empresa porque te aporta datos de cada área de negocio.
- Planificación. Te permite planificar la estrategia de la empresa a medio y largo plazo.
- Información de calidad. Los datos que te ofrece el CMI son de gran valor porque se pueden medir los procesos internos de la empresa.
- Tendencias de mercado. La información del cuadro de mandos te ayuda a saber cuáles son las tendencias que están funcionando en el mercado. Así, puedes avanzar a la competencia o modificar una mala planificación.
En cuanto a los contras, la mayoría están relacionados con los pros en el sentido que una mala elección de un CMI haría temblar la estructura de la empresa por su repercusión en la estrategia.
Otro riesgo es no elegir bien los indicadores, lo cual implica peligros en la gestión y en la toma de decisiones. Además, hay que hacer frente a un coste mensual para encargarse del mantenimiento del software del CMI y que este funcione correctamente.
Así puede ayudar un cuadro de mando integral al trabajo en remoto
Una de las características de esta herramienta es la posibilidad de mejorar el trabajo en remoto. En esta línea, es la mejor opción para cualquier empresa que haya optado por la modalidad de teletrabajo. No hay nada más sencillo que facilitar la actividad de los agentes que trabajan desde casa adaptando las funcionalidades del CMI.
En este sentido, la reconfiguración del cuadro de mando integral permitirá crear una mejor experiencia de cliente y para los agentes. Además, se podrán contemplar con mayor precisión los objetivos comerciales. Este CMI, entre otras facilidades, hará posible que se alineen los desafíos de la empresa con los de los agentes.
En el marco del trabajo en remoto, el uso del CMI ha significado un antes y un después, y todavía más sabiendo que la pandemia de la Covid-19 sentó un precedente respecto al trabajo no presencial
En esta línea, el feedback con los agentes mejorará notablemente. Servirá, asimismo, como herramienta de aprendizaje y crecimiento. También hará posible que aumente la participación de los agentes. Por tanto, el cuadro de mando integral tiene un papel destacado en los entornos de trabajo en remoto.
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