Todos los sistemas se quedan obsoletos con el paso del tiempo. Por ello, muchas empresas todavía cuentan con sistemas sin actualizar. Lo habitual es que los sistemas legacy no reciban ni soporte, ni mantenimiento. En este sentido, el portal ComputerWorld confirma que este escenario es motivo de preocupación para las empresas, especialmente para las usuarias de IT. Los responsables de las empresas, en este sentido, tienen el deber de estudiar a fondo cuáles son sus sistemas heredados, y la idoneidad de mantenerlos o migrarlos.
¿Qué son los sistemas legacy?
Los sistemas legacy o sistemas heredados, por definición, son los que se han quedado desfasados en las empresas. Por sistema legacy entendemos tanto los equipos como las aplicaciones. Lo que tienen en común, en este contexto, es que tanto en los equipos como en las aplicaciones no es nada fácil cambiar estos sistemas. Sin embargo, hay que valorar los riesgos que implica mantener un sistema legacy obsoleto. Son los siguientes:
- Incompatibilidad. Las empresas pueden correr el riesgo de hallar incompatibilidades en sus sistemas. Eso es así porque si trabajan con tecnologías desactualizadas, no pueden optar a las ventajas y las características que brindan otros sistemas nuevos.
- Brechas de seguridad. Un sistema obsoleto implica muchos riesgos. Entre ellos, carecer de soporte, no tener actualizaciones del sistema, ni tampoco mantenimiento. Un sistema heredado usa estándares y protocolos viejos. De este modo están obligados a crear parches que repercuten en la seguridad, y además hace difícil poder cumplir con la regulación. La seguridad en la nube ofrece muchas más garantías.
- Menor rendimiento. La productividad y el rendimiento se ven afectados seriamente. Los sistemas heredados, con el tiempo, se van ralentizando. En esta línea, es frecuente perder rendimiento, eficiencia y productividad.
- Más costes de mantenimiento y menor competitividad. El gasto que genera un sistema obsoleto supone usar recursos económicos en una herramienta que, finalmente, tendrá que ser reemplazada. Por tanto, afecta a las inversiones de la empresa y resta competitividad.
¿Por qué las empresas mantienen los sistemas heredados?
Una vez vistos los riesgos, cabe preguntarse por qué las empresas mantienen los sistemas legacy. El principal motivo es para amortizar la inversión inicial, ya que este tipo de inversiones implican un coste elevado para las corporaciones. Sin embargo, hay otros factores que influyen para renunciar al cambio.
- La razón más lógica y práctica es que estos sistemas aún son útiles para la compañía, o son sistemas con una misión crítica.
- La empresa aún no ha tenido capacidad de amortizar la inversión inicial del sistema. Cabe recordar que la inversión en sistemas IT es importante. Las empresas, en este sentido, necesitan tiempo para recuperarse. Sin embargo, el hándicap de la evolución de la tecnología les pisa los talones.
- Hacer el cambio de un sistema legacy a otro supone una inversión de recursos importante. La empresa no solo tiene que hacer frente a la inversión económica, sino al tiempo que se necesita y a la implicación de los trabajadores en el proceso de aprendizaje de un nuevo sistema. A veces, una empresa no está en disposición de asumir esa disyuntiva.
- La empresa puede no tener las competencias IT para poder afrontar la migración del sistema heredado, bien por falta de información, bien por falta de recursos.
- Es frecuente que las empresas no tengan las especificaciones técnicas para equiparar el sistema obsoleto al nuevo. Lo normal es que los sistemas reciban muchas modificaciones durante su tiempo de uso, para poder adaptarlos a las necesidades de la empresa.
- Y finalmente, puede ocurrir que, sencillamente, la empresa no quiera reemplazarlo.
¿Cómo migrar los sistemas legacy a la nube?
Es obvio que estos sistemas se configuran como una misión crítica para las empresas. En esta línea, la migración se ha de evaluar, analizar y planificar porque siempre tiene ventajas para las compañías, sin importar a qué se dediquen.
La forma más sencilla de migrar aplicaciones y sistemas heredados a la nube es hacerlo en un entorno de cloud privado. Este entorno permite hacer configuraciones a medida de lo que necesita la empresa; cosa que no ocurre con un cloud público. Por esta razón, ejecutar la migración es mucho más sencillo. Así, las aplicaciones legacy pueden funcionar sin necesidad de modificarlas.
En el momento en que se migran las aplicaciones heredadas de un centro de datos on-premise a un cloud privado, se tiene la ventaja de aprovechar la escalabilidad de los entornos cloud. Así, se pueden mantener las configuraciones y ahorrar en costes (pago por uso, sin costes extra por instalación o mantenimiento o actualizaciones). Lo habitual, en estos casos, es crear un entorno virtual que imite al entorno original.
Una alternativa intermedia sería integrar un RPA (sistema de automatización robótica de procesos) en un sistema legacy. Aunque en principio parece complejo, es posible hacer que ambos sistemas convivan. La tendencia es integrar tecnologías modernas en sistemas antiguos. El resultado es positivo: son más fáciles de usar y ambas se mejoran mutuamente.
En resumen, mantener los sistemas legacy implica riesgos y costes que una empresa debe asumir si quiere seguir esa línea. Sin embargo, las soluciones de telefonía en la nube como Cloudya de NFON te evitarán más de un quebradero de cabeza. No requieren hardware, es un software fácil de instalar en cualquier dispositivo y cuenta con actualizaciones de sistema gratuitas de por vida. Y es que en NFON trabajamos para que la tecnología cloud sea tu aliada en las comunicaciones de tu empresa. ¿Hablamos?
